Un punto de vista más cerca acerca del alcohol

El alcohol es la droga de mayor consumo en el mundo, es una droga aceptada socialmente, ya que hace años se le denominó como “Legal”.

Es cierto que no todas las personas actúan mal, algunas realmente pueden mantener un comportamiento aceptable y disfrutar de un momento de esparcimiento y continuar con su vida normal y productiva; sin embargo, vemos casos de personas que están en la misma fiesta, bebiendo lo mismo y algunas de ellas tienen comportamientos inadecuados causando problemas e incluso poniendo en riesgo a los demás.

En algunos lugares es parte de las costumbres beber cerveza y desde niños se les permite beber para que prueben o porque es gracioso ver las caras de los niños al saborear la amargura de una cerveza, por supuesto que esto puede ser chistoso, pero desde entonces estamos iniciando a nuestros niños que no está mal beber.

La situación es que: un problema de adicciones tiene detrás de él, cuestiones de vida emocionales que no se han resuelto y el alcohol como otras drogas se consume para no enfrentar estas situaciones y así encontrar una solución a lo que no nos permite ser feliz.

Desde luego esto no quiere decir que una persona estable emocionalmente, responsable y consciente pueda consumir drogas porque será capaz de controlarlas, eso no es así, una persona estable, responsable y consciente ni siquiera considera una opción el consumo de drogas ilegales pero de alcohol si, y la razón de ello es porque es legal, sin que sea su intención se va metiendo en un mundo en el que de repente se ve a sí mismo bebiendo continuamente hasta que un día, esta persona considera que sería buena idea experimentar con otras drogas, porque el consumo repetitivo va generando dependencia. No podemos olvidar que un problema de adicción se construye en tres factores: emocionales, mentales y físicos, y cualquiera de ellos puede atrapar a un individuo.

Así es, el alcohol es una droga de inicio, nos da el valor o la estupidez para experimentar con otras substancias y va mermando nuestra vida hasta que ese individuo productivo, responsable y consciente pierde su identidad y se hunde en un mundo de adicción.

En pláticas con muchos padres de familia he encontrado que no les parece incorrecto que sus hijos vayan a antros o reuniones y que beban porque son chicos estudiosos que cumplen con sus obligaciones de estudio o laborales y porque no permitir que tengan un rato de esparcimiento, son jóvenes y se lo han ganado.

En el antro vemos a chicos gastando grandes sumas de dinero en alcohol en nombre de la diversión, y si muchos de ellos afortunadamente lograran seguir sus vidas y alcanzar sus metas, pero los que no lo consiguen, que hacemos con ellos, ¿cuál es la media que nos permita mantener el control en la situación?

La respuesta es la prevención.

Existen muchos factores de riesgos a los que las personas están expuestas y que es importante considerarlas con el propósito de poder evitar que un ser querido caiga en la adicción.

El primero es el entorno familiar, cuando existe un entorno familiar difícil, donde no hay una convivencia sana, donde existen problemas mayores que son recurrentes, como violencia, adicciones, o cualquier otra situación difícil, los niños o adolescentes crecen en este entorno y van afectando sus pensamientos o su comportamiento al ser una experiencia caótica, ellos encuentran en las drogas en este caso el alcohol una escape a la realidad que están viviendo y se vuelven vulnerables o propensos a tener un consumo no por diversión, sino por querer olvidar la situación familiar.

La falta de comunicación y convivencia por exceso de trabajo causa que las relaciones familiares se limiten y al tener esta carencia, las personas buscan aceptación o integración en grupos de personas que conviven dentro de la moda del consumo, y de igual forma el alcohol al ser un estimulante les permite sentirse mejor al respecto de su vida.

La falta de límites, los límites son muy importantes durante el crecimiento, haciéndole saber a los niños y jóvenes lo que está bien y es correcto para formarlos con responsabilidad y la habilidad para enfrentar consecuencias, dejar que los jóvenes puedan consumir a su libre albedrío solo porque son buenos estudiantes o productivos les hace creer que pueden hacer lo que quieran en vez de hacer lo que deben.

La falta de conversar acerca de temas tabús por la educación recibida, por miedo, por ignorancia provoca curiosidad en los jóvenes y hace que se atrevan a experimentar con alcohol, es necesario hablar con claridad acerca de los temas que estamos viviendo sin cambiar, ni querer hacer pensar que no existen, finalmente ellos lo averiguaran y generalmente puede ser con un amigo que tenga la misma o más confusión al respecto.

Falta de información acerca de con quien se está relacionando nuestro ser querido, se debe estar alertas de quien son, quien es su familia a que se dedican, mostrar interés e incluso control cuando se deba intervenir para evitar alguna relaciones.

Y lo más importante, fomentar valores e integridad personal a través del ejemplo, no se le puede decir a una persona que no haga algo cuando uno mismo no es capaz de cumplir con ese estándar, la permisividad es el error más grande que existe.

Todos estos factores, cuando existen en la vida de los niños y adolescentes, las posibilidades que caigan en un consumo de alcohol se vuelven más altas, al ser el alcohol una droga permitida hace más fácil la elección.

Desde luego que la decisión está en ellos, finalmente cada uno de nosotros es responsable de su propia condición; sin embargo, hacer una evaluación de cómo esta nuestra vida nos puede dar una guía para evitar que nuestro ser querido caiga en las adicciones.

También está el hecho de que hay familias donde los factores antes mencionados no existieron y aparentemente todo estaba muy bien y en control y a pesar de ello cae una persona en adicción, una inspección de los hechos nos arrojara situaciones emocionales con las que la persona no esta pudiendo lidiar.

Por todo ello es muy importante que exista un esfuerzo por mejorar nuestras vidas, comprometernos con nosotros mismos a ser mejores personas, para así formar individuos seguros, íntegros y responsables. Tener la capacidad de reconocer cuando hay carencias para así prevenir calamidades.

El alcohol es una droga y al igual que todas as demás, destruye individuos, familias, sociedades, la adicción al alcohol es solo el resultado de la sociedad que hemos creado y es momento de confrontarlo y hacer algo al respecto.

Este artículo está basado en 25 años de experiencia de ser un staff de Narconon México, son mis propias observaciones y conclusiones después haber logrado que cientos de personas hayan podido superar un problema de adicción y ahora puedan tener vidas felices, ser miembros de la sociedad productivos y libres de adicciones al alcohol y/o drogas

Si conoce a un familiar con problemas de adicción al alcohol, aquí en Narconon México estamos listos para ayudarle.