¡Soy Melani y soy una persona libre de adicciones!

 

Por un buen tiempo fui presa de mis propias de decisiones al estar entrampada en un círculo vicioso de alcohol, marihuana y psicofármacos para contrarrestar. Mi vida iba en una espiral descendente y no sabía hasta donde toparía, mi mundo era gris y no le encontraba ni sentido ni razón a nada, simplemente respiraba y así pasaban los días.

Todo mi entorno era un caos total, en el cual, las emociones principales que experimentaba a diario eran el miedo, la ansiedad, la tristeza y el sufrimiento. Estaba en una relación de pareja donde reinaban los golpes, insultos y desprecio. Al no recibir amor, ni ser valorada, ni respetada, cada día crecía aún más un vacío en mí que sólo era compensado con más y más substancias psicoactivas.

De vez en cuando me daba cuenta de que estaba viviendo fuera de la realidad porque prácticamente vivía anestesiada, tenía mucho miedo de confrontar y prefería callar lo que sentía. Quizá por arte de magia las cosas cambiarían, pero nunca sucedió.

Llegué al punto en que definitivamente ya no era yo, ya no tenía el valor de reconocerme ante el espejo y, en entre esos chispazos de conciencia, me daba cuenta de todo lo bueno que había en mi vida y que lo estaba desperdiciando.

Un día desperté de la anestesia porque ya no soportaba más vivir como lo hacía. Fue entonces que decidí pedir ayuda, gracias a que mi mamá me habló de Narconon México tomé la decisión de hacer el Programa.

Cuando llegué todo era nuevo para mí y el Programa es muy diferente a todo lo que había escuchado sobre procesos de rehabilitación en drogas y alcohol, por lo que dudé si había tomado la decisión correcta.

El primer paso que realicé fue la Retirada Libre de Drogas, en el cual, un miembro del staff me acompañó todo el tiempo. Gracias a su ayuda pude pasar a través de las molestias del síndrome de abstinencia, para ello, utilizó diversas técnicas especiales y una nutrición adecuada. Me gustó mucho porque no utilizan ningún tipo de fármaco para paliar el dolor.

Por mucho tiempo me había sentido presa de mi adicción y de la forma en la que vivía con aquella pareja. Por primera vez en mucho tiempo pude descansar y soltar el miedo que siempre me acompañaba. También, durante la etapa de Retirada, me ayudaron a manejar la ansiedad y la angustia.

El siguiente paso fue la Desintoxicación de la Nueva Vida, se trata de una combinación de ejercicio, sudado en sauna de calor seco y un régimen nutricional exacto. Por fin conocí a mis demás compañeros y me descubrí conviviendo con ellos de manera natural sin ningún tipo de substancia, la sensación me gustó mucho porque por fin empezaba a salir mi verdadera personalidad.

Desde que comencé con el sauna, mi cuerpo se fue limpiando progresivamente y no sólo de las toxinas de las substancias que consumí, sino también de los conservadores de los alimentos y hasta de la radiación solar a la que he estado expuesta toda mi vida.

Gracias a este paso recuperé el amor por el ejercicio y me di cuenta de que corriendo me siento en libertad. Otra vez la vida presentaba sus matices de colores y eso me hizo muy feliz, el sauna no fue fácil pero cada día valió la pena para descubrirme en un “cuerpo limpio y una mente clara”.

La siguiente etapa se trata de una serie de procesos llamados Objetivos, tienen como finalidad alejar la atención de los recuerdos del pasado para enfocarla en el entorno presente e inmediato. En este paso aprendí a conocerme mejor, a comunicarme de una manera más efectiva y a tener control sobre mis emociones. Me di cuenta de que soy yo quien labra su futuro y que tengo la capacidad de crear las cosas a mi favor.

“Uno de los momentos más impactantes de ese paso fue que de golpe, regresó mi amor propio, mi seguridad y mi verdadera personalidad, de una manera tan real que nunca la había visto ni sentido de esa manera”…

Finalmente estaba en la última etapa del Programa. Se trata de una serie de cursos que se llaman “Destrezas para la vida”, en ellos aprendí el valor de conducirme con ética para lograr mis metas. También supe identificar a todas las personas que me rodean para poder elegir aquellas que aportan algún beneficio a mi vida y alejarme de quienes no.

Gracias a estos cursos pude darme cuenta de todas y cada una de las acciones que había cometido en mi vida que perjudicaron a los demás. Por fin pude soltar todo ese bote de basura lleno de piedras y tierra que por años me acompañó, con el único propósito de tomar consciencia y sobre todo responsabilidad para resarcir el daño causado.

Me di cuenta de que no sólo había traicionado a muchas personas que me querían, sino que me había traicionado a mí misma por haber callado mis convicciones con todas las substancias que consumí.

Hoy que termino el Programa tengo mis maletas listas con las herramientas necesarias para lograr todas las metas y sueños que de ahora en adelante me proponga, a mis 24 años de edad.

Gracias al Programa de Narconon México, no tengo miedo de estar sola y de que merezco a una pareja que me quiera, que me respete y que caminemos juntos para construir un futuro mejor para los dos.

De ahora en adelante mis decisiones y acciones estarán enfocadas al cuidado de mí misma y de las demás personas a quienes quiero y me rodean. Nunca me arrepentiré de haber tomado la mejor decisión de mi vida, y esa fue hacer el Programa en Narconon México.

¡Ahora tengo una vida feliz, placentera y dichosa, esto comenzó el día que decidí venir a Narconon México!

Melani, Graduada de Narconon México